Nos ponemos al volante del tercer Opel Astra que pasa por nuestras manos desde que comenzara su comercialización la última versión.

En esta ocasión el elegido es el tope de gama en motorización diésel; el 1.6 CDTI de 160cv BiTurbo. 2 turbos en serie de diferentes tamaños que proporcionan empuje desde muy bajo régimen hasta el corte de la bomba sobrepasadas las 4000 revoluciones.

Sabiendo que Opel en su edición anterior del Astra ya monto una versión también BiTurbo, solo que en el 2.0 CDTI y más potente, 190cv, no podíamos dejar pasar la oportunidad de probar el nuevo 1.6 CDTI en su variante más radical.

Hasta ahora en el Astra solo habíamos probado motores de gasolina. El 1.4 Turbo de 150cv y el 1.6 Turbo de 200cv, ambos muy silenciosos y de buenos consumos.

El 1.6 CDTI nos ha parecido un motor agradable al uso, silencioso desde dentro que no desde fuera y con una ausencia casi total de vibraciones en los diferentes elementos como el volante, palanca de cambios o pedales.

El actual Opel Astra ya lleva un tiempo en venta en nuestro mercado y, poco a poco, la gama ha ido completándose tanto en diésel como en gasolina. Dispone de varios tipos de carrocería, compacta de 5 puertas, Coupé de 3 puertas, y la familiar, Sports Tourer.

Todas ellas cuentan con los últimos avances en tecnología y con mecánicas eficientes en cuanto a consumo y bajas emisiones, con unas prestaciones más que dignas, incluso en los propulsores de acceso a la gama.

En gasolina el acceso a la gama es por parte del 1.0 Turbo EcoTec de 105cv, el mismo que monta el Opel Adam que probamos hace unos meses, puedes leer su prueba aquí.

El siguiente escalón es el 1.4 Turbo de 125 o 150 cv respectivamente. Como colofón se puede optar por el 1.6 Turbo de 200cv tanto en la versión Coupé, 5puertas o en la Sports Tourer.

En diésel el acceso a la gama lo da el 1.6 CDTI con 110cv, pasando por su versión de 136cv, para terminar en la aquí probada BiTurbo de 160cv.

“Todas las mecánicas montadas en el Opel Astra son turbo alimentadas con independencia de su carburante

Externamente el Opel Astra ha ganado muchos enteros, se muestra como un vehículo serio, de calidad, con buen empaque, pero que no pierde el aspecto juvenil. Valido para todos los públicos. Nuestra unidad contaba con el acabado intermedio, “Dynamic” que viste aún más al Opel Astra con unas llantas vistosas y los faros inteligentes “IntelliLUX” de tipo matricial que hacen que lo noche se convierta en día, con el uso de la tecnología LED. También los numerosos extras como los asientos ergonómicos AGR dotan de una mejor presencia al interior.

En el interior, como sucede en el exterior, nuestra unidad con el acabado Dynamic disponía de prácticamente todos los opcionales, desde los faros matriciales a unos asientos –AGR-  forrados en piel micro perforada completamente electrónicos y calefactables o refrigerados. Un lujo sin duda y de una alta comodidad.

El puesto de conducción es amplio, de fácil colocación para el conductor mediante los diversos ajustes que proporciona el asiento desde altura, lumbares a de la parte baja de la espalda. El volante, forrado en piel y calefactable, permite regulación en altura y profundidad.

El cuadro de instrumentos, de fácil lectura, nos proporciona información como la presión de los neumáticos, el nivel de aceite o la degradación del mismo. Todo ello en el ordenador de a bordo, que cuenta con mucha y variada información útil para el conductor.

El salpicadero sobrio y de buena presencia es agradable al tacto, sus materiales son plásticos pero de buena calidad. Gomosos al tacto y que nos dejan mostrar una alta calidad en la construcción.

Los sistemas multimedia están gobernados mediante una pantalla táctil de generoso tamaño donde podemos hacer uso de la radio, navegador e incluso del WIFI.

El motor desde el interior gracias al buen aislamiento lo hacen casi imperceptible, ni siquiera las vibraciones se atreven a filtrarse. El 1.6 CDTI BITurbo es muy silencioso al ralentí y en marcha, solo se deja oír y notar si demandamos potencia y a de subir de revoluciones.