Las mentiras de los políticos

Más de la mitad de las propuestas en materia de tráfico y seguridad vial de 2004 han brillado por su ausencia. Ni puntos negros, ni más guardias civiles, ni Agencia de Seguridad Vial… Pero sí más radares, mayores sanciones y hasta penas de cárcel. ¿Cómo serán los próximos cuatro años?

La cuenta atrás ya ha comenzado. Y el Gobierno ya ha puesto sus cartas sobre la mesa. Las propuestas para los próximos cuatro años no son tan dispares a las presentadas en 2004. Pero, ¿se cumplirán esta vez?

Una de las grandes apuestas del PSOE en las pasadas elecciones fue la de crear la Agencia de Seguridad Vial. Ésta, estaría formada por un conjunto de expertos de titulación universitaria, como mínimo, dedicados, entre otros asuntos, a la investigación de accidentes. En esa agencia debían de estar integradas todas las políticas y las administraciones, incluidas las de Cataluña y País Vasco. Sería un nexo de unión entre todas las administraciones públicas que intervienen en el tema de tráfico. De este modo, desaparecería la Dirección General de Tráfico (DGT). Esta interesante propuesta ha quedado en la creación de un Observatorio Nacional de Seguridad Vial, una herramienta de datos, estadísticas e investigación del que se sirve, precisamente, la DGT.

Carreteras
En materia de infraestructuras, los socialistas prometieron, entre otras muchas cosas, hacer carreteras más seguras y mejorar las existentes. Y señalizar los puntos negros de nuestra red viaria. ¿Alguien ha visto algún cartel de peligro por la proximidad de un punto negro? Nosotros, aún no. Y, como medida de prevención no estaría mal, a expensas de corregir como es debido ese punto negro.

Para los próximos cuatro años ha prometido elaborar, en colaboración con las Comunidades Autónomas, el “Barómetro de la Seguridad en las infraestructuras Viarias” para un mejor conocimiento y valoración del estado general de las carreteras y de todos los elementos que inciden en una mayor seguridad de los usuarios.

Vigilancia
En 2004 el PSOE planteó que durante tres años consecutivos, el número de efectivos de la Guardia Civil se incrementara en 1.000 plazas anuales destinadas a la ordenación y vigilancia. Es decir, un total de 3.000 plazas más. Según un portavoz de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, por aquel entonces eran 8.107 agentes en plantilla. A día de hoy, son 8.989 agentes. ¿Dónde están esos 3.000 agentes más?.

Sin embargo, convencido de que la mayor presencia policial en las carreteras supone más seguridad y menos accidentes, no cesa en su empeño y propone seguir ampliando el número de agentes hasta 11.000 y «mejorar las condiciones de vida y trabajo de los agentes para dar a la especialidad la importancia que tiene y merece».

Educación y formación
Los cambios en la formación se han limitado al examen teórico, que ha pasado de 40 a 30 preguntas y la mitad de ellas referidas a conceptos básicos de la seguridad vial. Además, solo se permiten tres fallos, mientras que en el modelo antiguo se podía tener hasta cuatro. Pero, al parecer, este cambio no fue suficiente y a finales de enero se aprobó en el Consejo de Ministros un Real Decreto por el que se modifica parcialmente el Reglamento General de Conductores en relación con el examen teórico de tal modo que si la prueba actual consta de 30 preguntas con una sola respuesta posible, el nuevo cuestionario puede tener hasta cuatro y omitir una de ellas será computado como error. Aunque eso sí, se eleva de tres a seis el umbral de fallos posibles.

Para esta nueva legislatura apuestan por una conducción segura y eficiente para la actualización de los conocimientos teóricos y prácticos de los conductores. Lo que no explican es cómo.

Hay algo que en los programas electorales de 2004 se dejó pasar. El tema de las emisiones contaminantes. Recordemos que en España el 40 por ciento de las emisiones de CO2 se debe al transporte por carretera y es un importante reto reducir esos niveles. Por eso, el Gobierno, en su programa de 2008 dice que «pondrán en marcha una Comisión de Seguridad Ambiental y apoyarán activamente la introducción en el mercado de los vehículos y combustibles más limpios, a través de instrumentos económicos para fomentar su adquisición por los ciudadanos».

En marcha
Lo que tampoco debemos hacer es negar la evidencia. Y hay propuestas que se han llevado a cabo y a rajatabla. Por ejemplo, en 2004 el PSOE propuso incrementar el número de radares y así ha sido. Con una nueva oleada de cinemómetros ha conseguido reducir la velocidad media en 3 km/h en tres años. De 116,7 en 2005 a 113,8 en 2007. Para la próxima legislatura promete ampliar hasta 2.000 los puntos controlados por radares fijos en las carreteras.

Pero sin duda, el mayor compromiso de nuestro Gobierno ha sido la puesta en marcha del Carné por Puntos, en vigor desde julio de 2006. Pesa a las posibles lagunas legales y defectos que este sistema pueda tener, la realidad es que ha dado sus frutos.

La cifra de muertos en carretera en 2007 descendió a 2.741 fallecidos, por debajo de los 3.000 fallecidos por primera vez en los últimos 40 años.

Y por último, no debemos olvidar la última reforma del Código Penal. En esta legislatura se ha querido definir con mayor rigor los delitos contra la seguridad del tráfico y los relacionados con la seguridad vial. Además, se ha creado la Fiscalía Especial para delitos contra la Seguridad Vial. Guste o no, son propuestas cumplidas.

Fuente: Autopista.