Luces de cruce diurna = 150 vidas salvadas

image
Utilizar las luces de corto alcance durante todo el día para conducir permitiría reducir en unas 150 personas el número de muertos al año en accidentes de tráfico y en 4.500 personas la cifra de heridos, según estimaciones de la Fundación Española para la Seguridad Vial (Fesvial).

Así, Fesvial calcula que esta medida, que la DGT ha empezado a recomendar y será obligatoria en Europa a partir del 7 de de febrero de 2011, cuando entre en vigor una normativa al respecto aprobada por la Comisión Europea, permitiría evitar entre un 2% y un 4% los accidentes.

Un porcentaje que se dobla hasta el 4% y el 8% en el caso de los atropellos a peatones, según la fundación, que señala que el 95% de las decisiones que adopta un conductor se basan en la información visual que le llega del entorno, por lo que aumentar la visibilidad del coche «no es una cuestión irrelevante».

En este sentido, Fesvial señala que la National Highway Traffic Safety Administration (NHTSA), el fabricante de automóviles General Motors, el Institute for Road Safety Research (SWOV) y la Comisión Internacional de la Iluminación, entre otras entidades, han recomendado esta medida.

Entre los argumentos a favor de la medida, la fundación destaca: que es una iniciativa bien aceptada por la población, que mejora la percepción de la presencia de los vehículos y, por tanto, disminuye el tiempo de reacción del conductor, que los sistemas de luces Daytime Running Lights (DRL) consumen poco combustible, no deslumbran y duran mucho, y que sirve para evitar distracciones.

En el otro lado de la balanza, Fesvial señala como puntos en contra: que se produciría un cierto incremento en el gasto de combustible, por lo que cabría esperar un cierto impacto medio ambiental, que se tendrían que cambiar con mayor frecuencia las bombillas, que puede haber peligro de deslumbramiento si las luces no está bien regladas, que hay menos visibilidad de la luz de frenada y tercera luz en coches sin DRL de origen.

Sin embargo, el catedrático de Seguridad Vial de la Universidad de Valencia y presidente de Fesvial, Luis Montoro, considera que «hay un balance claramente positivo de esta medida, pese a la existencia de algunos puntos negativos que están muy por debajo de los beneficios que se pueden obtener».