El jefe de GM habla: La bancarrota está en duda, el destino de HUMMER se sellará este mes

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Y si antes hablábamos de Saab, ahora toca la General en general. Valga la redundancia. Fritz Henderson ha dado una conferencia de prensa hace unas horas, y aunque la reunión telefónica se ha cerrado sin grandes noticias, sí que ha soltado alguna perla que otra.

El nuevo timonel de General Motors ha negado su intención de declararse en bancarrota, pese a que dicha opción sigue estando presente en los planes del grupo. Digamos que sería su última posibilidad, algo totalmente in extremis. Aunque no sabríamos si la situación de GM se podría calificar de otra manera. El 1 de junio veremos qué pasa.

En cuanto a la reorganización del grupo. Henderson ha dicho que sigue buscando una «estrategia de cuatro marcas». En otras palabras, Chevrolet, Cadillac, Buick, y GMC se quedan, mientras que Pontiac quedaría relegada a una división minoritaria. De acuerdo a lo dicho, tanto GMC como Buick son firmas «muy rentables», y aparentemente algunos de los mejores modelos que se lanzarán próximamente llevarán el escudo (o los escudos) de la segunda. Ahora bien, cuando se le preguntó sobre la seguridad de ambas marcas, no quiso garantizar nada en absoluto, y es que parece que nadie es imprescindible en los tiempos que corren.

Por otro lado, Henderson también ha expresado su deseo de conservar a Delco en su poder, una compañía «altamente rentable» para GM. Menos suerte tiene HUMMER, que recibirá las pujas de tres compañías la próxima semana. GM anunciará su decisión de una vez por todas (esperamos) a finales de mes. Sobre Saab, Henderson ha confirmado el interés de varios grupos, y otro tanto se puede decir de Saturn. Resulta de especial interés el desmentido oficial de que sólo hay una compañía interesada en la marca; algo en línea con lo que hemos escuchado durante los últimos días.

Finalmente nos queda la cuestión Opel. Más de seis pretendientes tendría el fabricante alemán propiedad de General Motors; según Henderson, serían nombres conocidos en el mundo financiero y de la industria. Las negociaciones comenzarán en cuestión de dos a tres semanas, aunque no es que Opel se encuentre a las puertas de la muerte; los incentivos del gobierno alemán han estimulado sus ventas de manera importante, y el exitoso arranque del Insignia tampoco juega en su contra.

Esto es todo por el momento. Si quieres, ya puedes sacar el rotulador y comenzar a marcar las semanas clave en tu calendario. Los próximos 30 días serán moviditos.