La FIA abre un poco la mano

Después de publicar la nota de prensa que te comentábamos ayer, parecía que la guerra FIA FOTA se iba a encarnizar, pero nada más lejos de la realidad. Parece que la situación ha obligado a la FOTA a aceptar negociar antes de mañana un acuerdo con la FIA.

Evidentemente, y como todos llevamos anticipando, una solución in extremis a horas de decidirse la parrilla del 2010 va a ser alcanzada, pero la cuestión de todo este tema era ver quién llegaba más fuerte a este final de la negociación, para ceder lo mínimo posible y proclamarse victorioso.

Ahora que tenemos claro que la mayor parte del problema era económico, por la inclusión de nuevos equipos, y que la FOTA ya ha perdido esa batalla, parece que la FIA va a abrir la mano en ciertos temas reglamentarios.

De acuerdo con la federación, a lo largo del día de hoy va a negociar con los equipos la derogación de algunas normas, como la prohibición del uso de calentadores en los neumáticos. Además, no se permitirán coches con tracción total (algo que a pesar de que suene raro, tenía muchas papeletas de producirse, al potenciarse el KERS y poderse implantar sobre el eje delantero). Los motores se mantendrán congelados, y solo Cosworth podrá rodar sin limitaciones de revoluciones y con margen de desarrollo, algo normal si tenemos en cuenta que será su primera temporada, y habrá de buscarse la manera de que sea competitivo.

Se mantiene la regulación sobre alerones móviles, aplicada ahora al trasero además de al delantero. Y lo más importante de todo, la FIA, en un movimiento por el que habíamos apostado muchos, está dispuesta a ampliar el tope presupuestario para 2010 hasta los 100 millones de euros.

Lo más preocupante es que los chicos de Max Mosley aceptarían el control presupuestario por parte de un auditor externo de cada escudería, pero seleccionado por los propios equipos (y pagado por ellos) cosa que pondrá seguramente en entredicho la veracidad de los datos económicos. Por otro lado, no se sancionará deportivamente a los equipos que incumplan el límite presupuestario, como solicitaba la FOTA, así que esto perderá cierto sentido, pues les dará pie a poder gastar lo que quieran, ya que no tienen problemas por ello.