No por conocido, este dato deja de ser noticia. Hace tiempo que se venía rumoreando y escuchando de boca de los responsables de AMG que sus futuros productos dejarían de buscar las cifras de potencia brutas, y se comenzarían a centrar en una mejora sostenible de sus emisiones y consumos, ganando al mismo tiempo la eficiencia de sus coches, con objeto de conseguir prestaciones a través de una buena relación peso potencia, más que por músculo puro.
De acuerdo con la publicación AutoTelegraaf, tanto la inyección directa como el sistema de Start & Stop se implementarán a partir del próximo año en los modelos que componen la gama AMG. El objetivo final es conseguir reducir las emisiones y los consumos de sus modelos en un 30% a lo largo de los tres próximos años, lo cual ya representa un buen ahorro de combustible. Veremos si todo ello se logra sin perder garra y ese sonido bronco tan característico.
