Mosley dice que la situación se arreglará, la FOTA hace oídos sordos

La batalla continúa en el universo FIA FOTA. Mientras Vettel viajaba por Silverstone a toda pastilla en su RB5 para conseguir un perfecto hat trick secundado por Webber, Max Mosley se dedicaba a informar a la prensa de los avances en las negociaciones.

Según Mosley, las diferencias entre la FIA y la FOTA son mínimas, y la federación ha expresado a los equipos su firme intención de sentarse a negociar para solucionar el tema. El propio Max además confirmaba que no se había roto el contacto con la FOTA, y que las posibilidades de ver un campeonato alternativo son mínimas.

Pero como cuando la mujer pide el divorcio al marido, la FOTA ya ha comenzado a preparar los papeles de la separación. Según informaron varios jefes de equipo, su decisión de montar un campeonato paralelo es definitiva, y se reunirán este próximo miércoles para sentar las bases reglamentarias, elegir la empresa organizadora (supuestamente DORNA) y marcar un calendario de trabajo.

¿A quién creemos ahora? La FIA lo tiene mal, pues muchos equipos de los que se inscribieron para participar en la F1 2010 no quieren saber nada de correr sin «los grandes» en el campeonato. Pero es que la FOTA tampoco puede organizar así como así un campeonato desde cero, más teniendo en cuenta que tres de las escuderías tienen contratos vinculantes con la FIA y la FOM, y que Williams y Force India siguen unidos a la F1.

Se comentaba que USF1 había sido invitada a tomar parte en el campeonato alternativo, pero no sabemos si esto ha sucedido también con otros candidatos como Prodrive, Epsilon Euskadi, etc.

Lo que es más probable es que la FOTA se esté tirando un enorme farol, haciendo oídos sordos a las declaraciones de Mosley. El miércoles se reunirán, y sacarán un comunicado con datos del nuevo campeonato, lo que dará credibilidad a sus intenciones, y pondrá contra las cuerdas a Mosley y Ecclestone, que no les quedará otra que ir arrastrándose hasta la FOTA para pedir clemencia, momento en el cual se cerrará (presumiblemente) el acuerdo.

Al final, si todo sale según lo previsto, la imagen de la FIA quedará tremendamente dañada. Su presidente tendrá que dimitir sí o sí, aunque es de estas personas que se aferran al cargo a toda costa. Pero lo que no se puede permitir es una federación débil, que siempre ceda a los intereses de Ecclestone o de la FOTA. Jackie Stewart, te esperamos en octubre en las oficinas de la FIA para que pongas orden a esta locura con tu falda escocesa.