Un 10 por ciento de las empresas desaparecerá

Una de cada diez empresas españolas del sector del automóvil presenta un riesgo máximo de insolvencia, de forma que el 9 por ciento de las compañías de automoción podrían desaparecer antes de que termine este año, según un informe del Gabinete de Estudios Económicos de Axesor.

El estudio, titulado ‘El Sector de Automoción Español’, revela que el 25,4 por ciento del tejido empresarial del automóvil (10.765 sociedades) está en una situación de alto riesgo de impago. De esta cifra, 3.869 empresas (el 9 por ciento del total) presentan un riesgo máximo de insolvencia.

Actualmente, el 20 por ciento de las compañías del sector está inmerso en algún procedimiento judicial por impago. Además, los concursos de acreedores en el sector aumentaron un 320 por ciento en el primer trimestre del presente ejercicio.
El sector pierde el 10 por ciento del empleo hasta marzo

El sector del automóvil dispone de 41.938 empresas activas, después de que el pasado año se dieran de baja 585 sociedades. Esta evolución ha tenido una repercusión directa sobre el empleo, de manera que en el primer trimestre del año se destruyeron 18.759 puestos de trabajo, lo que supone una reducción de la plantilla global del 10,8 por ciento.

En otro orden de cosas, el informe de Axesor poner de manifiesto que las ayudas a la compra puestas en marcha por el Gobierno alemán pueden resultar más valiosas para la industria española que el propio Plan 2000E lanzado por el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero.

Esto es debido a que España destina el 12 por ciento de su producción automovilística a Alemania, mientras que la demanda nacional de coches fabricados en las factorías españolas se limita al 20 por ciento.
El Plan 2000E limita la caida de ventas al 20 por ciento

Con todo, el Plan 2000E permitirá suavizar la caída de las matriculaciones de automóviles hasta situarla en un rango de entre el 20 por ciento y el 25 por ciento. Sin este programa de ayudas directas a la compra, el mercado cerraría este año con un desplome del 37,5 por ciento.

Según el estudio, 2008 marca un punto de inflexión para la industria automovilística española que, tras varios años de bonanza, concluyó el pasado ejercicio con un derrumbe de las matriculaciones del 28 por ciento, el mayor de la historia.