Muchos sufrimos cuando tenemos que dejar por alguna razón el coche en el taller. ¿Cómo lo estarán tratando? ¿Qué le estarán haciendo? Sí, es un problema de paranoicos, pero… El caso es que Audi nos trae una curiosa solución que se va a empezar a implantar en Gran Bretaña: Una cámara integrada en la cabeza del mecánico, así como una radio para comunicarse con el propietario del vehículo.
Mientras este se sienta en la sala de espera, puede observar cómo el metódico técnico de la casa de los cuatro aros va realizando las operaciones de servicio que toquen, y en el caso de alguna incidencia, puede hablar con el propietario del coche para intercambiar ideas o tomar decisiones.
¿Friki? Sin duda alguna… Por el bien del mecánico, esperemos que la comunicación vía radio sea sólo cuando el necesite la opinión del dueño del coche, y no para escuchar los típicos «me vas a rayar la llanta», «lavate las manos, guarro, antes de tocar la palanca de cambios», «no aprietes eso tanto»… etc.
