El presidente de la Federación de Asociaciones de Concesionarios de Automoción (Faconauto), Antonio Romero-Haupold, considera que el Gobierno debe conceder apoyo financiero a Opel, pero a cambio de entrar en el accionariado y en el consejo de administración del fabricante automovilístico.
‘El Gobierno tiene que poner lo que sea, pero a cambio de puestos en el consejo de administración de Opel y de acciones’, ha manifestado el también presidente de la Asociación Nacional de Concesionarios de Opel (Ancopel).
A su juicio, si España otorga algún tipo de ayuda financiera a la filial de General Motors, debe, ‘por lo menos’, tener acceso a la información que se debata en el seno de su consejo de administración, para evitar posibles ‘sorpresas’.
‘Lo demás es aventurar’, ha añadido Romero-Haupold, quien considera que el Ejecutivo tiene que estar al tanto de las decisiones para poder reaccionar a tiempo. En este sentido, ha recordado que otros fabricantes europeos, alemanes y franceses, tienen capital público y representantes gubernamentales en sus consejos de administración.
Opel negocia con diferentes gobiernos europeos, entre ellos el español, la concesión de avales para financiar su plan de reestructuración, cuyo coste asciende a más de 3.700 millones de euros, de los que 1.900 millones procederán de su matriz.
La firma automovilística sigue negociando con Alemania, a la que corresponderá la mayor parte de la contribución, mientras que la aportación española podría situarse entre 300 y 500 millones de euros, según ha revelado en febrero el diario ‘Financial Times’.
El Gobierno de Aragón, donde se ubica la factoría de Figueruelas, ha avanzado que el eventual aval que España pueda conceder a Opel será conjunto entre el Ejecutivo central y la administración autonómica.
