No vamos a hacer pucheros, porque realmente ya no teníamos asumido. Saab ha comunicado a través de su blog oficial que no tendrá presencia en el Salón del Automóvil de Frankfurt, donde teóricamente tenía que presentar la nueva generación del 9-3 en forma de concept muy avanzado o incluso show car. El motivo seguro que ya te lo imaginas: no hay dinero ni para pagar los sueldos a tiempo, así que los pocos recursos económicos «libres» que Saab tiene a su disposición han de ser invertidos en cubrir sus necesidades más urgentes.
En palabras del fabricante de Trollhattan, aunque es decepcionante de no poder mostrar sus coches en una de las ferias más importantes del mundo, gastarse el dinero que no tienen en marketing sería inapropiado, irresponsable y poco respetuoso hacia los inversores de la compañía, que dicho sea de paso, están demostrando más paciencia que el santo Job.
Hasta ahí, todo entendido. Lo que no sabemos es qué sucederá con la nueva generación del 9-3 (o como termine llamándose), dado que algunos rumores señalan que su lanzamiento se ha retrasado varios meses por la falta de cash, lo que a su vez podría forzar la demora del prototipo. Desde luego, si estas informaciones son correctas, poco sentido tendría mostrar en septiembre un coche que no estaría a la venta hasta 2013.
