El Instituto de Biomecánica de Valencia (IBV) ha realizado un estudio del que se desprende que los consumidores buscan seguridad, confort y facilidad de uso de los mandos a la hora de comprar un coche.
Según un comunicado de la Generalitat, el IBV ha estudiado qué aspectos del interior de los automóviles llaman más la atención de los usuarios a la hora de percibir la calidad del vehículo y que pueden llegar a influir en la decisión de compra. El estudio, en el que han participado 320 hombres y mujeres con permiso de conducir y coche, ha concluido que la calidad de un vehículo reside en primer lugar en la seguridad de la que está dotado.
En cuanto al interior del coche, la mayoría de consultados ha equiparado calidad con confort y alcances, si bien con el paso de los años, según el estudio, se da más importancia a la fácil lectura y comprensión del panel de instrumentos, el tacto del volante, a la visibilidad del panel y a que haya más espacios de almacenamiento. En cambio, los jóvenes valoran más que los mandos tengan muchas funciones y que el vehículo incluya una mejor estética en zonas como la consola central y el cambio de marchas.
El proyecto ha utilizado la tecnología «EyeTracking» para analizar dónde y cómo perciben los usuarios la calidad del coche, detectar qué elementos del diseño y zonas llaman más la atención y determinar el umbral de calidad exigida para definir protocolos de inspección.
Además, esta iniciativa ha permitido desarrollar una metodología que incluye al usuario a lo largo de la cadena de producción, gracias a la que las empresas podrán «producir componentes de alta calidad que se ajusten mejor al vehículo demandado por el usuario».
El proyecto, cofinanciado por el Instituto de la Pequeña y Mediana Industria de la Generalitat Valenciana (IMPIVA) y la iniciativa Collective Research Networking (CORNET) a través del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER), es fruto de la colaboración del IBV con dos laboratorios alemanes.
