BMW M Performance oficializa su avalancha diésel con cuatro modelos triturbo de 381 CV

¿A quién le importa que el diésel cueste ya más que la gasolina? A BMW no, está claro. Su nueva gama BMW M Performance acaba de empezar con una salva de cañonazos que nos ahorrará el esfuerzo de tener que ir descubriendo una a una las novedades que lanzará a lo largo de 2012, y que se resumen rápidamente: tracción 4×4 y un potente motor diésel con tres turbos y 381 CV.

Los modelos escogidos para tan singular puesta en escena son como ya esperábamos el Serie 5 (en sus dos carrocerías), el X5 y el X6, que tras someterse a una operación a corazón abierto para trasplantar un nuevo motor y una transmisión de ocho marchas terminarán adoptando las denominaciones M550d xDrive, M550d xDrive Touring, X5 M50d y X6 M50d.

Al frente de estos cuatro modelos de nívea e inmaculada presencia en sus álbumes oficiales se encuentra un portentoso motor de 3,0 litros (2.993 cc para ser exactos), seis cilindros en línea, tres turbos y un empuje colosal. Son 381 CV los que desarrolla entre las 4.000 y 4.400 vueltas, con tope en 5.400 revoluciones, mientras que el par, aún más impresionante, se eleva a 740 Nm desde 2.000 vueltas por minuto. Dos turbos pequeños y uno de mayores dimensiones se encargan de hacer que la entrega de potencia sea suave y a la vez eficiente. De hecho, BMW afirma que el X5 M50d consume en ciclo combinado exactamente lo mismo que el X5 xDrive40d.

Gallery: BMW M550d xDrive 2012

La transmisión es en los cuatro casos una caja automática de ocho marchas con levas en el volante, cuyo funcionamiento ha sido ajustado por el departamento deportivo de BMW, al igual que el sistema de tracción integral xDrive y los propios reglajes del chasis. BMW indica que cada coche ha sido puesto a punto de forma totalmente independiente en cada uno de sus aspectos, buscando «un comportamiento dócil y previsible».

Visualmente la familia diésel de M Performance también recibe algunos ajustes diferenciadores, que van desde los paragolpes a las llantas. En el caso del M550d da la impresión de que lleva el kit M Sport, pero una inspección más detenida muestra la integración de dos elegantes colas de escape trapezoidales de color negro específicas del modelo y que le sientan de maravilla sobre el blanco de la carrocería escogido para las fotos oficiales.

Por cierto, como el M5 incluirán de serie el sistema Sound Design de BMW, que según el fabricante «acentúa» el sonido del motor a través del equipo de audio usando las señales enviadas por la electrónica. Habrá que ver oír si no hace como la superberlina V8 y se inventa un sonido a lo Lady Gaga para ocultar el ronroneo diésel.

Regresando a los guarismos, está claro que con 381 CV en ristre estos petroleros de altas prestaciones no podrán equipararse al 100% con un M de pura sangre y sed de gasolina como insinuaban los primeros rumores, pero pobre del ingenuo que quiera buscarles las cosquillas sólo porque hay una letra «d» al final de sus nombres.

Estas son sus cifras oficiales tal y como han sido comunicadas por la compañía:

BMW M550d xDrive:
Aceleración [0 – 100 km/h]: 4,7 segundos.
Velocidad máxima: 250 km/h.
Consumo promedio: 6,3 litros/100 kilómetros.
Emisiones de CO2: 165 g/km.

BMW M550d xDrive Touring:
Aceleración [0 – 100 km/h]: 4,9 segundos.
Velocidad máxima: 250 km/h.
Consumo promedio: 6,4 litros/100 kilómetros.
Emisiones de CO2: 169 g/km.

BMW X5 M50d:
Aceleración [0 – 100 km/h]: 5,4 segundos.
Velocidad máxima: 250 km/h.
Consumo promedio: 7,5 litros/100 kilómetros.
Emisiones de CO2: 199 g/km.

BMW X6 M50d:
Aceleración [0 – 100 km/h]: 5,3 segundos.
Velocidad máxima: 250 km/h.
Consumo promedio: 7,7 litros/100 kilómetros.
Emisiones de CO2: 204 g/km.

¿Convencido? Hemos hablado tanto ya sobre los futuros modelos diésel firmados por M que imaginamos que a estas alturas no cabe susto ni espanto posible. Será el mercado quien tenga la última palabra, pero dejamos en cualquier caso la sección de comentarios a tu disposición para que opines al respecto.