Opel ADAM

El Opel ADAM tiene tres puertas, cuatro plazas y mide 3,7 m de longitud. Es más pequeño que el Corsa, pero casi igual que un Agila. Estará a la venta en marzo de 2013 y su precio de partida será 12 080 euros (precio final, con descuento promocional incluido). Su equipamiento todavía no ha sido detallado.

El Agila y el ADAM son coches completamente distintos. El primero es un modelo práctico, muy bien aprovechado por dentro y con un equipamiento suficiente. El ADAM tiene poco espacio para ocupantes y equipaje. Sin embargo, da más aspecto de calidad que el Corsa, está fabricado con gran atención por el detalle y ofrece muchas más posibilidades de personalización que cualquier otro modelo de Opel. De hecho, es uno de los coches del mercado con más opciones para cambiar su apariencia interior y exterior.

Entre otras muchas cosas, es posible elegir molduras para las llantas, varios acabados para el techo (tanto por su cara interior como exterior) o distintas pegatinas para la carrocería. Además de lo anterior, hay tres paquetes decorativos, que incluyen detalles que afectan tanto al equipamiento como acabado exterior e interior. Estos tres ambientes son GLAM, SLAM y JAM. A finales de noviembre Opel lanzará un configurador por internet donde será posible ver a la carta todas las combinaciones posibles.

Además de los elementos puramente decorativos, el ADAM también sobresale porque su equipamiento de confort o seguridad puede ser particularmente extenso, con elementos que todavía no están disponibles en coches de su tamaño. Así por ejemplo, puede tener un sistema de aparcamiento automático («APA II») que, como otros dispositivos similares, puede mover el volante sin intervención del conductor (no así los pedales y el cambio de marchas). También puede llevar detección de vehículos en el ángulo muerto («SBSA», basado en un sistema de ultrasonidos en lugar de cámaras o radar). Como otros modelos de Opel de mayor tamaño, el ADAM también está preparado para el sistema integrado de transporte de bicicletas «Flex Flix» (en este caso, para un máximo de dos).

Según Opel, uno de los equipamientos opcionales estrella será el sistema de información o entretenimiento «IntelliLink», que costará 310 euros. Permite controlar las funciones del equipo de sonido, el teléfono, reproducir archivos de audio y vídeo o configurar determinados aspectos del coche. Tiene la peculiaridad que se puede conectar a teléfonos (con el sistema operativo iOS o Android) y, previa descarga de aplicaciones, algunos de los contenidos del teléfono estarán disponibles en la pantalla de la consola (imagen). En el momento del lanzamiento habrá disponible una aplicación de navegación denominada «BringGo» que, una vez descargada en el teléfono, permite la navegación sin necesidad de tener acceso a internet y otra que se denomina «Stitcher» para acceder a podcasts de radio.

Durante la breve toma de contacto, me ha parecido que la pantalla de la opción «IntelliLink» (de siete pulgadas) queda un poco baja y por ese motivo hay que desviar mucho la vista de la carretera para consultarla. No puedo decir mucho sobre su facilidad de manejo, pero la primera impresión que me ha dado es que, como todos sus botones son táctiles, estos no se reconocen al tacto y por lo tanto hay que retirar constantemente la vista de la carretera. Algunas funciones, pocas, se puede controlar desde los mandos del volante.

El ADAM, a diferencia del Agila o del Corsa, es un coche pequeño por dentro. Las plazas anteriores tienen espacio suficiente en todas las direcciones incluso para pasajeros corpulentos, pero las posteriores son especialmente reducidas. De hecho, la falta de espacio atrás es tan evidente que se sitúa como uno de los modelos menos espaciosos de la competencia; tiene incluso menos espacio que el Fiat 500 (aunque las diferencias son pequeñas). El MINI, que también es una posible alternativa (aunque es ligeramente más grande por fuera y costoso) tiene unas plazas traseras más amplias. Tabla comparativa con mediciones de interior.

Frente al Fiat 500, el ADAM ofrece alguna ventaja clara, como un puesto de conducción mucho mejor resuelto, con más regulaciones y una posición más acertada tanto del volante como de los pedales y del apoyo para el pie izquierdo. En definitiva, se va más cómodo a los mandos del ADAM que a los de un Fiat 500. También me parece que tiene un acabado de mayor calidad.

El maletero tiene solo 170 litros, con lo cual es menor que el de la mayor parte de los coches pequeños, igual que el de un MINI y sólo supera al de un Citroën C1 (o un Toyota Aygo o un Peugeot 107, que los tres son básicamente el mismo coche).

El ADAM está muy cuidado. Eso, por ejemplo, se nota en que no hay chapa a la vista en el interior de la carrocería, en que los asientos son mejores de lo normal en este tipo de coches (pequeños) y, en general, el buen aspecto que transmite en conjunto.

En el momento del lanzamiento se podrá elegir con tres motores de gasolina, uno de 1,2 litros de cilindrada y 69 caballos y otros dos de 1,4 l con 87 y 101. Van combinados con una caja de cambios manual de cinco velocidades.

Se podrá añadir un «paquete ecológico» que sirve para consumir menos carburante: consta de un sistema de arranque y parada durante las detenciones y un indicador que aconseja el momento para cambiar de marcha para así ahorrar carburante. Más adelante, el ADAM estrenará un motor de gasolina de pequeña cilindrada con turbocompresor e inyección directa de gasolina. De momento Opel no ha dicho qué potencia tendrá. Irá en combinación con una caja de marchas de seis velocidades.

El motor de 87 caballos de potencia mueve con agilidad al ADAM, al menos en ciudad y carreteras fáciles. De hecho, siempre que no haya condiciones muy desfavorables, el ADAM con este motor puede circular con aparente facilidad por encima de la velocidad máxima permitida en España. En vías con pendientes grandes tiene poca reserva de aceleración.

La distancia entre ejes es 2311 mm, por lo tanto, es más corta que la de un Opel Agila y la de un Opel Corsa (y más larga que la de un Fiat 500). Tanto la vía delantera como la trasera miden lo mismo que las de un Opel Corsa (1485 mm la delantera y 1478 mm la posterior, que son grandes para un coche de esta longitud).

Las llantas podrán ser de entre 15 y 18 pulgadas de diámetro. Los ADAM con llantas de 17 y 18 pulgadas llevarán de serie una suspensión distinta («chasis Sport») que los modelos con las llantas más pequeñas y una dirección más directa. Esa suspensión estará disponible en opción en los ADAM con las llantas de menor tamaño. La dirección tiene un programa específico para un uso urbano que aumenta su asistencia a baja velocidad.

He probado la versión teóricamente menos confortable de la gama, con llantas de 18 pulgadas y la suspensión deportiva. Esta configuración hace que el coche sea firme, aunque no incómodo. El ADAM responde bien en curva, aunque no me ha parecido un modelo tan adecuado para disfrutar de carreteras de curvas como por ejemplo un MINI.