Youngman volverá a la carga la semana que viene para comprar Saab

La historia de zombies en la que se ha convertido la bancarrota de Saab sigue adelante. La semana pasada te comentamos el incierto futuro de la colección completa de modelos Saab del museo, que serán subastados con efecto casi inmediato en un intento de conseguir algo de liquidez para mantener la compañía en el proceso de bancarrota unas semanas más, mientras se espera una oferta «por el pack completo», en lugar de tener que desmembrarla a cachos para sacar dinero para pagar las deudas comprometidas.

Según comentan en varios periódicos locales, Youngman habría estado invitando a visitar sus instalaciones en China a varios de los acreedores y proveedores de Saab durante los últimos días. Según se comenta en el diario financiero sueco Di.se, la intención de Youngman sería ofrecer nada menos que 550 millones de euros tan pronto como la semana que viene.

Si la operación se realizara, Youngman pondría en marcha un plan para volver a producir el 9-3 en un plazo inferior a cuatro semanas, a base de usar proveedores externos a General Motors, con lo que circundar las licencias existentes en las piezas, y poder contar con un coche «en producción». El 9-5 y el 9-4X quedarían descartados de la gama, y se invertirían otros cientos de millones de euros en completar el desarrollo de la nueva plataforma Phoenix para dar lugar a un nuevo 9-3.

Esta operación, que tiene cierto grado de urgencia, sólo es viable si Youngman puede comprar «toda la compañía». Y es que ya ha habido varios movimientos para desmembrar partes como la rama de ingeniería de Saab, cosa que eliminaría cualquier interés por parte de Youngman de quedarse con la casa sueca.

¿Ocurrirá el milagro? Nuestra fe está por los suelos, pero quién sabe.