A veces me pregunto si la DGT está poniendo todos los medios a su alcance para mejorar la calidad de los conductores españoles y, por ende, reducir con ello la siniestralidad.

Vengo abogando, hace ya años, por la conducción tutelada para los jóvenes entre 16 y los 18 años plenamente convencido de su eficacia, y todavía no comprendo como la medida no es contemplada de una vez por todas por el Ministerio del Interior y la Comisión Nacional de la Seguridad Vial, desde el Congreso de los Diputados.

¿Qué lo impide? ¿Qué ocultos intereses? En la actualidad ni siquiera pueden dar una respuesta a esta especie de feto que, en permanente formación, no acaba de alumbrar. Las autoescuelas parecen haber oído campanas pero, preguntados, no parecen tener respuesta.

Y mientras la DGT sigue debatiendo sobre si “eran galgos o eran podencos”, una ley del marzo del 1991 modificando la anterior de 31 de julio de 1975 sobre los permisos de conducir en la vecina Francia, establece, entre otras medidas, la conducción con acompañante a partir de los 16 años.

Esta norma, vigente desde hace años en una buena parte de los países de la UE y en Los Estados Unidos, persigue, entre otros objetivos, el de dotar a los jóvenes de una experiencia que les va a resultar de gran utilidad, no sólo por su propia seguridad, sino para que el sistema, si el acompañante del alumno es un familiar o un amigo, para que los costes no sean tan insoportables para muchos padres debido al número de horas de práctica que han convertido la obtención del permiso en una inversión que no guarda relación con el propósito que se persigue.

Estas son las normas que existen en Francia desde 1991.

1. Todo aprendiz debe ineludiblemente inscribirse en una autoescuela y recibir 15 horas de práctica a su elección, desde el momento que ha decido el aprendizaje.
2. La preparación de la prueba teórica general no está incluida en ese periodo.
3. Haber aprobado el examen teórico y proveerse de un carné de aprendizaje que debe de conservar hasta pasar el examen definitivo a los 18 años.
4. El joven debe elegir un acompañante(pariente o amigo) con una edad mínima de 28 años y con un permiso de conducir, al menos. de tres años de antigüedad.
5. El aprendiz debe recorrer un mínimo de 3.000 kilómetros durante todo el periodo que dure su aprendizaje (aquí la legislación francesa introduce también un periodo mínimo de 6 horas que llaman pedagógico, en la autoescuela).
6. La obtención del examen teórico es válido durante 3 años, para que al alcanzar la edad de 18 sólo tenga que examinarse del práctico.

Paco Costas