Mazda3 MPS (2010)

Corría el año 2008 cuando probamos el Mazda3 MPS. Ahora volvemos a probar el Mazda3 MPS, solo que esta vez se trata del restyling que sufrió el Mazda3 en el 2009. El actual Mazda3 MPS utiliza la misma mecánica con la misma potencia, los cambios son solo estéticos. En temas de mecánica todo sigue igual. Los 260cv extraídos del 2.3 de cuatro cilindros turbo alimentado siguen estando en forma. Y son capaces de ponernos los pelos de punta en zonas reviradas. Exteriormente si comparamos al actual MPS con el anterior podemos observar como lo han caracterizado mas, ahora no pasa tan desapercibido como antes. La doble salida de escape y una buena entrada de aire desde el capó al intercooler nos hacen saber que estamos ante un MPS. Interiormente el salpicadero y botoneria es idéntico al de cualquier Mazda3 fabricado a partir del 2009. Los asientos aun siendo una versión deportiva no sujetan todo lo bien que deberían. Los pétalos laterales son demasiado pequeños. El navegador esta en una mala posición y su tamaño es pequeño. Tenemos que fijarnos demasiado para ver algún dato. Quitando la vista de la carretera.

Visibilidad
En cuanto a visibilidad el Mazda3 MPS en general no presenta problemas, la visión que tiene el conductor hacia cualquier parte del exterior desde el vehículo es buena, la visibilidad delantera es la correcta. La trasera al igual que en todos los vehículos queda mermada por los reposacabezas, pero si los bajamos a su posición mas baja no molestan. Los retrovisores tanto exteriores como el interior son de buenas medidas, y dan una visión clara de lo que acontece fuera del vehículo. La versión MPS equipa de serie faros bi-xenon. La capacidad de iluminación de estos faros es buena, no excelente. Aun siendo xenon se les nota un poco faltos de fuerza. Son capaces de iluminar una gran parte de la vía con mucha anchura.

Impresiones de Conducción
La primera unidad del Mazda3 MPS que tuvimos en el 2008 andaba como un demonio. En algún medio conocido salieron los datos de potencia medidos en banco y estaba rondando los 300cv. Una bestialidad. La unidad probada ahora, entregaba su potencia homologada. Nada de cv regalados a base de un soplido bestial del turbo. Que hacían que el coche fuera en ocasiones intratable. Con esta última unidad los 260cv se entregaban de manera contundente si así lo solicitábamos. También podíamos realizar una conducción relajada sin tener problemas con la entrega de potencia. Si sacamos todo el potencial del propulsor lo mejor es hacerlo en línea recta y con el volante recto, en esa circunstancia podremos sacar los 260cv a relucir. Si lo hacemos con el volante demasiado girado el propio coche no nos permite una entrega fuerte de potencia, el par se reduce. Sucede igual en las tres primeras marchas si aceleramos con fuerza el par baja para no perder tracción. Y eso que el MPS dispone de un buen control de tracción y de un autoblocante mecánico. En una conducción rápida el MPS es un coche muy divertido, tenemos una gran potencia desde bajas vueltas aprovechable hasta prácticamente el corte de inyección. Como ya hemos comentado la entrega de potencia es mas brusca que en por ejemplo vehículos como el Seat León Cupra R ó Volkswagen Scirocco R.

Frenada
Al igual que otros compactos potentes, no solo es cuestión de un motor resultón y potente para tener un bólido rápido. También tenemos que tener en cuenta los frenos, suspensiones etc… En este caso Mazda ha montado en el MPS un equipo de frenos excelente. Los discos delanteros auto ventilados de 320 Mm. y traseros macizos de 280 Mm. son capaces de detener al MPS en muy pocos metros y no acusar en exceso el calentamiento por uso intensivo de los mismos. El control de estabilidad (DSC) y el ABS de última generación son de serie en el Mazda3 MPS

Tracción
El Mazda3 MPS es un compacto potente con tracción delantera. Los 260 CV que desarrolla el propulsor son trasmitidos solo al eje delantero. Y en ocasiones no es capaz de digerir tal cantidad de potencia. Aun teniendo autoblocante, control de tracción activado y unas buenas ruedas (215/45/18″) tendremos perdidas de tracción en salidas, curvas enlazadas. Pero no es un problema para nada grave, solo sucede en días de lluvia, y teniendo tacto con el acelerador, no sucede este fenómeno. Es un vehículo que requiere una adaptación por parte de su conductor. El conductor tiene que aprender a conducir este vehículo y con el tiempo poder sacar el máximo partido el MPS, que da mucho juego.

Estabilidad
La estabilidad del Mazda3 MPS se podría comparar salvando las distancias a la de un «kart», va muy durito de suspensiones, pero sin ser molesto en conducción urbana. En carretera se agradece tener un tarado de suspensión duro y de un recorrido eficaz. El Mazda esta rebajado de suspensión y cuenta con unas barras estabilizadoras más anchas que las de los Mazda3 normales. El chasis ha sido reforzado para así tener una mayor rigidez en conducción decidida. Con todas estas mejoras el MPS tienen un 60 por ciento menos de balanceo.

Reposacabezas
El Mazda3 MPS tiene cinco reposacabezas, de los cuales, los delanteros son regulables en altura, no en inclinación. Los traseros al igual que los delanteros, solo son regulables en altura. Ninguno es activo.

Cinturones
El Mazda3 MPS monta cinco cinturones del tipo estándar de tres puntos de anclaje. Los delanteros cuentan con pretensores pirotécnicos y avisador acústico de cinturón no abrochado al emprender la marcha.

Bebes y Niños
El Mazda3 MPS esta equipado con el sistema ISOFIX de anclaje de sillitas de bebes. Aun que se trata de una versión deportiva es perfectamente valido para el transporte de niños.

Airbags
El Mazda3 MPS trae de serie en este acabado ocho Airbag, que son: De conductor, acompañante (desconectable mediante llave), laterales, de cortina, etc…

Euroncap
En las pruebas EuroNCAP el Mazda 3 MPS obtiene: 5 estrellas para la protección de ocupantes y 4 estrellas para la protección infantil un total de 33 puntos sobre 39.

Recuperaciones
El Mazda3 MPS tiene una aceleración de 0 a 100 Km. /h de 6,1 segundos. Recuperando en tercera marcha desde 80 Km. /h a 120, lo hizo en 3,7 segundos, en cuarta marcha lo hizo en 4,4 segundos. En quinta marcha en 5,2 y en sexta marcha en 8,1 segundos. Como es comprensible a medida que metemos una relación superior el tiempo aumenta.

Caja de Cambios
El Mazda3 MPS monta en esta versión deportiva una caja de cambios manual de seis relaciones. El tacto de la palanca es duro, muy directo. Introducir las marchas requiere un poco mas de fuerza que en otras cajas normales. Una vez en marcha el cambio de una marcha a otras es rápido, pero podía serlo más, ya que en conducción rápida hay ocasiones en la que la caja se vuelve un poco lenta. La sexta marcha es de 41,7 Km cada 1.000 revoluciones, es un poco corta para un vehiculo como este, muy aprovechable en todo tipo de carreteras.

Circulando por Carretera
En carretera es donde de verdad podemos apreciar que lleva el Mazda3 MPS debajo del capó, en esta caso un propulsor de 2.3 litros, con inyección directa, intercooler y turboalimentado que eroga 260 CV a 5500 revoluciones. En carreteras sinuosas de montaña disfrutaremos de este gran propulsor tanto de sus capacidades de aceleración, como de su bonito sonido a altas vueltas. En carretera haciendo una conducción decidida el consumo que obtuvimos supero en poco los 20 litros a los 100. También destacar que si mimamos el acelerador, el consumo puede bajar sin problemas de los 10 litros a los 100km recorridos.

Circulando por Autopista
En autopista el Mazda3 MPS, es cómodo en carreteras en buen estado. Ya que su suspensión resulta un poco seca si pasamos por pavimento en mal estado, y trasmite los ruidos y golpes al interior del habitáculo. El consumo en autopista es relativamente bajo, si vamos a una velocidad constante de 120 Km/h podemos tener consumos muy bajos para la potencia del propulsor que equipa el MPS.

Circulando por Ciudad
En ciudad el Mazda3 MPS tiene unos consumos altos, de unos 13 litros a los 100. El manejo del MPS por ciudad es bastante cómodo, la buena respuesta del propulsor ayuda en incorporaciones rápidas. La suspensión aun siendo enérgica y de un corto recorrido no resulta incomoda para un uso en ciudad. Pasar los temibles resaltos o badenes no se convierte en un calvario. El motor nos permite ir muy bajos de vueltas ahorrando lo máximo posible en carburante. El MPS tiene un bonito sonido de escape a bajas vueltas, un tono grave que gusta.

Calidad de Acabados
Los acabados utilizados en el Mazda3 MPS son de buena calidad, a simple vista se puede observar que los plásticos encajan bien entre si, y que no hay ruidos extraños.

Calidad de Materiales
Materiales de buena calidad, plásticos aparentes y de un buen tacto. Al igual que en las telas utilizadas.

Conclusiones
En resumen, el nuevo Mazda3 MPS es prácticamente igual al anterior, en el aspecto mecánico son iguales. Sólo cambia de aspecto, más atractivo, entra más por los ojos. La versión MPS destaca más de sus hermanos de gama con motorizaciones más bajas. Para ojos inexpertos no pasa desapercibido. Interiormente el salto de calidad es notable, un interior mejor construido y más atractivo, moderno. Mejor aislado acústicamente que el anterior MPS. Y un puesto de conducción cómodo que nos parecerá al recorrer pocos kilómetros que este MPS ha sido nuestro coche de toda la vida.

A favor: Prestaciones, paso por curva, espacio interior.
A mejorar: Consumos, pérdidas de tracción.

Redactor y probador: Daniel Galdeano Martínez
Fotos: Daniel Galdeano Martínez
Vídeo: http://www.youtube.com/watch?v=GdNU8wWZLTY