Nos ponemos al volante del renovado Volvo XC60 en su acabado Inscription con motor T5 y la interesante tracción total AWD.

El nuevo Volvo XC60 viene a sustituir al anterior modelo con mismo nombre que, ya se estaba quedando anticuado tanto estéticamente como a nivel mecánico.

Externamente el nuevo Volvo XC60 tiene una alta semejanza con el Volvo XC90, lo mismo le sucede al pequeño y recién llegado a la familia, el XC40.

Todos ellos parecen cortados por un mismo patrón, siguiendo la nueva línea de la marca sueca.

El anterior Volvo XC60 que pudimos probar hace ya un par de años nos dejó muy bien sabor de boca, bien es cierto que ya acusaba el cansancio tanto estético como a nivel tecnológico de un modelo que ya estaba finalizando su vida comercial.

Aun con eso el XC60 presumía de una más que alta calidad en la construcción y de sus materiales. También hablamos de las bondades del motor, en ese momento, D5, dotado de un propulsor turbo diésel de 5 cilindros en línea y 2,4 litros de cilindrada.

Un motor que hasta no hace mucho Volvo uso a lo largo de más de dos décadas, naturalmente, siendo actualizado hasta su desaparición total por un dos litros turbo alimentado capaz de erogar más potencia, tener mejores consumos y ser más respetuoso con el medio ambiente.

La unidad probada con el acabado Inscription, el más alto de la gama que ya de serie viene muy surtido en todo tipo de gadgets y ayudas. La verdad es que a este nuevo Volvo XC60 no le falta de nada.

El motor probado es gasolina turbo alimentado, algo cuanto menos raro y curioso de ver en vehículos de esta clase, hasta donde no hace mucho era un coto cerrado para los motores diésel.

La versión T5 no es más que una denominación, ya no hace referencia al mítico bloque de 5 cilindros en línea turbo y 2,5 litros de cilindrada que tan buenos éxitos ha dado a la marca y, fuera de Volvo, muy usado por Ford en sus versiones más prestacionales.

Ahora el T5 no es más que un 2 litros turbo, eso sí, con nada más y nada menos que 254cv. Dentro de la gama en gasolina, con el mismo bloque motor, podemos optar por diferentes versiones y potencias:

  • Motor T5 258cv
  • Motor T6 320cv
  • Motor T8 Twin Engine 408cv

En diésel, sucede como con los motores de gasolina, el acceso a la gama es mediante el motor denominado D3 de 150cv. Pasando por el D4 de 190 y el tope de gama es el D5 con una potencia de 235cv.

El exterior del nuevo Volvo XC60 es más sobrio que el de su antecesor, el actual con líneas poco arriesgadas nos muestra su madurez y robustez, a pesar de tratarse de SUV de tamaño medio, en vivo parece más grande de lo que es.

Su interior, al igual que el exterior, es el de un modelo completamente nuevo, nacido desde cero. Con el acabado Inscription y los innumerables extras que vestían la unidad probada es difícil no enamorarse de este coche.

Desde un cuero de verdad, nada de piel sintética, cosido a unos butacones, porque es lo que son, ideales para realizar miles de kilómetros sin acusar cansancio.

Asiento que además de comodidad, regulación eléctrica son calefactados, ventilados y con función de masaje.

Todo el interior es ahora más sencillo, de fácil uso y manejo, desde la pantalla multimedia, de grandes y generosas dimensiones, algo que siempre es de agradecer, táctil y que nos permite gobernar todo desde unos pocos toques.

El cuadro de instrumentos como está haciendo la mayoría de marcas es también digital mediante una pantalla TFT, nos provee de mucha información que de otro modo, antes, era imposible.

Entre varios de los extras de la unidad probada como el cuero, nos encontramos con inserciones de madera natural y excelente al tacto, en partes claves de las puertas y salpicadero. Por supuesto, diferentes ayudas a la conducción como son el aviso de colisión con frenada City Safety. Dentro del Pack Xenium nos encontramos extras interesantes: Pantalla Head-up display, techo panorámico, cámara de aparcamiento 360º ideal para estacionar.

También la unidad probada disponía de la tecnología Drive Mode, que como su nombre indica, nos permite cambiar entre los diferentes modos de uso preestablecidos.

Probando todos, el más usable para el día a día es el Confort, donde obtenemos potencia y prima, como su nombre reza, el confort de marcha que, gracias a la suspensión neumática regulable tanto en altura como en dureza pasar por zonas bacheadas es una delicia.

Los otros modos, como el ECO, también perfectamente usable, que baja un poco la suspensión para volverlo más aerodinámico, consigue reducir notablemente los consumos del no muy sediento motor T5.

Por supuesto no podemos olvidar el modo Dynamic, donde con mayor facilidad y seguridad podemos obtener el máximo potencial del motor y el bastidor.

La suspensión también desciende en altura y se endurece muy notablemente, minimizando casi al máximo los balanceos de la carrocería en zonas más viradas. Siendo en el modo confort, lógico por otra parte, donde más inercias existen.

El modo Dynamic consigue que los 258cv provenientes del motor parezcan ser más y mueve con mucha soltura un conjunto de casi dos toneladas de peso.

El cambio automático de 8 relaciones mediante convertidor de par también se pone en modo Sport apurando al máximo las marchas y sacando el máximo jugo del motor.

Todo perfectamente medido y estudiado, la verdad es que se puede ir realmente rápido con el Volvo XC60, notando en todo momento una alta seguridad.