- Metanización biológica como nuevo proceso de producción de Audi e-gas.
- El Grupo Viessmann, primer socio de Audi para la producción sostenible de gas sintético.
- Finales de 2016: inicio de venta para el Audi A4 Avant g-tron.
Audi está expandiendo su capacidad para la producción de combustible producido de forma sostenible, el Audi e-gas. Con efecto inmediato, el Grupo Viessmann es la primera compañía asociada en producir cantidades adicionales de combustible sintético mediante un nuevo proceso biológico. La planta piloto de Allendorf, en el estado alemán de Hesse, inauguró su actividad el pasado mes de febrero.
El Audi e-gas Audi se produce por lo general en un proceso de dos atapas: electrólisis y metanización. En el primer paso, la electricidad generada de forma renovable se utiliza para descomponer el agua en hidrógeno y oxígeno. En la segunda fase, el hidrógeno se hace reaccionar con CO2 para producir metano sintético. En la planta de Audi e-gas en Wertle –estado alemán de Baja Sajonia– esto se realiza a base de un proceso químico-catalítico bajo alta presión y alta temperatura.
En la nueva planta Viessmann, la metanización es ahora puramente biológica. Microorganismos altamente especializados absorben el hidrógeno disuelto en el líquido y el dióxido de carbono a través de las membranas de sus células. A partir de estas moléculas pueden entonces formar la molécula de metano. El proceso se conduce bajo una presión moderada de unos cinco bar y a temperaturas relativamente bajas. “Estamos escribiendo aquí el siguiente capítulo en la historia del Audi e-gas”, comenta Reiner Mangold, responsable de Desarrollo de Producto Sostenible en AUDI AG, durante la ceremonia de inauguración. “Audi comenzó a producir combustible sostenible en Wertle hace unos dos años. Ahora también trabajamos con un socio que contribuyó al desarrollo de este nuevo proceso”.
La planta piloto establece otro hito técnico: es la primera planta de conversión de energía en gas, en toda Alemania, que utiliza la metanización biológica. Su fuerza reside en el hecho de que procesa directamente el dióxido de carbono contenido en el gas. A diferencia de la metanización química, el CO2 no necesita estar presente en alta concentración o en forma purificada, lo que abre nuevos caminos de obtención. Los tratamientos menores de aguas residuales y las plantas de biogás en las cuales no se realiza purificación de biogás, pueden considerarse ahora como fuentes de CO2.
Gracias a esta nueva asociación, Audi podrá en el futuro suministrar Audi e-gas producido de forma sostenible a un creciente número de clientes. Simultáneamente, la marca de los cuatro aros también está aumentando su línea de modelos impulsados por e-gas. A finales de 2016, se iniciarán en Europa las ventas del nuevo Audi A4 Avant g-tron. Este el segundo modelo de Audi que puede funcionar con GNC tras el Audi A3 Sportback g-tron, que está disponible desde inicios de 2014. Los usuarios pueden hacer funcionar ambos modelos con gasolina así como gas natural convencional, biometano o el Audi e-gas producido sosteniblemente.
El Grupo Viessmann inició la instalación por etapas de su planta piloto en marzo de 2015. Como la planta de Audi e-gas de Wertle, consume toneladas de CO2 en la producción de gas sintético. Además de Reiner Mangold, participaron en la inauguración de la planta de Allendorf el Ministro-Presidente de Hesse, Volker Bouffier, y el profesor Martin Viessmann, CEO y socio del Grupo Viessmann.
Consumo de combustible de los modelos mencionados:
Audi A4 g-tron:
Este vehículo todavía no está a la venta. No se ha sometido por lo tanto a la homologación por lo que no está sujeto a la directiva 1999/94/EG
Audi A3 Sportback g-tron:
Consumo de CNG en kg/100 km: 3.6 – 3.3);
Consumo combinado de gasolina en l/100 km: 5.5 – 5.1;
Emisiones combinadas de CO2 en g/km (CNG): 98 – 89;
Emisiones combinadas de CO2 en g/km (gasolina): 128 – 117.
El consumo, las emisiones de CO2 y la clase de eficiencia dependen de las llantas y neumáticos utilizados.